domingo, 20 de febrero de 2011

Espejo, espejito mágico.















La madrastra preguntaba a su espejito mágico y este respondía:

- Tú eres, oh reina, la más hermosa de todas las mujeres.

Y fueron pasando los años. Un día la reina preguntó como siempre a su
espejito mágico:

- ¿Quién es la más Bella?

Pero esta vez el espejo contestó:

- La más bella es Blancanieves.

Era la primera vez desde hace mucho tiempo que al levantarse se miraba al espejo y podía pensar en lo que quisiera, sin prisa.

Por fin la jubilación, a partir de mañana a cobrar sin currar, ya no madrugaré, y no tendré que pasar las noches agobiado por lo que sucederá mañana ni por lo urgente. Y por fin dejaré de estar presionado por ser el mejor, conseguir el acuerdo más favorable, presentar resultados, etc, etc, etc. Por fin podré ser yo mismo, buscar una afición y dedicarme a ella, y sólo si me apetece en ese momento, sin el menor remordimiento de que pase el tiempo sin ser eficiente. Por fin podré dedicarme a mi familia, leer todos esos libros que me parecieron interesantes y compre, pero aun no he leído. POR FIN.”

Pero pasados unos instantes el espejo contestó. - La más bella es...

Ahora tengo miedo al anonimato, a no ser nadie, a no ser reconocido, a que nadie me odie ni me ame. Y ahora tengo miedo de convertirme en un mirador de obras o de un paseante que sólo hace hambre hasta la hora de la comida. Me ha costado tanto tiempo y sacrificio llegar donde llegué, alcanzar el puesto de responsabilidad que he tenido, tantos años de esfuerzo, formación, dedicación. Y ahora cuando más preparado estoy...Como un músico que pasa toda la vida aprendiendo a tocar el violín y cuando mejor domina la técnica, le quitan el instrumento y encima le intentan convencer de que lo puede hacer igual pero chiflando. Ahora no tengo un departamento a mi servicio, y me han quitado lo que me hacía sentir un hombre importante, ¿qué seré yo sin mi halo de director general?¿Y ahora qué?”

No hay comentarios:

Publicar un comentario