sábado, 24 de septiembre de 2011

“No creo que haya nada peor que ser corriente” American Beauty



   En el marcado y circunstancias de hoy día, el precio del producto es muy importante, es más, el marcado de Internet ha penetrado realmente en la sociedad y es fácil obtener un producto y un comparativa de precios para escoger el más económico sin demasiado esfuerzo. La competición está abierta y es y será peor aún. Es muy difícil sobrevivir si una empresa no es verdaderamente eficiente ( produce el máximo con el esfuerzo realmente justo) a no ser que nuestro producto sea realmente único, exclusivo y diferenciador, en definitiva que no se pueda comparar y que sólo nosotros podamos ofrecer dicho producto ( o servicio).

   Ofrecer calidad no es suficiente. La calidad entendida como filosofía de trabajo, no es ya una ventaja competitiva sino tan sólo una forma de mantenerse en el mercado.

   Se acabó ser mediocre, pues los mediocres compiten en el nicho de mercado de lo económico y siempre existirá alguien que pueda ofrecer lo mismo por algo menos de precio.

   Pero a estas alturas ¿quién no sabe esto? La trivialidad y lo poco que aporta este texto de nuevo a los negocios se ve contrastada por lo poco que hacemos para modificarlo y ante una nueva circunstancia aplicamos métodos conocidos que funcionaron alguna vez. Un problema que he observado en las empresas de mi entorno es que algunas reaccionan al dolor inmediatamente y aplican soluciones o copian métodos de las que aparentemente sobreviven. Utilizamos los mismos gurús y mamamos de las mismas fuentes, escuchamos y utilizamos las mismas técnicas. Interesante sería ofrecer algo realmente diferente que no tenga competencia.


sábado, 17 de septiembre de 2011

Haz recapacitar a...





   Esta semana me ha llegado una sugerencia para hacer "recapacitar" a una persona a la cual todo el mundo quiere ayudar y sobreproteger, bonito y loable sin lugar a duda. Pero surge un problema; esta persona está superagustito sin la ayuda ni los consejos de nadie, por lo tanto no es rescatable y nosotros no debemos ir de salvadores.
Está saliendo de un atolladero en sus emociones y ha encontrado a una persona con la que disfruta de cierto relax o quizá encontró el amor de su vida.

   Equivocarnos es parte de la vida y no conlleva al fin del mundo-ni siquiera de nuestro mundo- no se pueden dejar pasar oportunidades por el riesgo de una equivocación.
Si nos tuviéramos que tirar desde una 7ª planta para ver lo que se siente la respuesta es fácil, no lo hacemos (¿verdad?) pues la consecuencia es cierta. Pero arriesgarse a un nuevo error “subsanable” por cierta posibilidad de éxito, aunque esta sea insignificante,  me parece perfecto.

   Los errores pueden ser de origen apriorístico*, es decir, previsibles por desconocimiento, ceguera, obstinación o cualquier cosa que provoque caer en él. O también pueden carecer de base empírica en los que las consecuencias o resultados son imprevisibles, estos se deben asumir sin lugar a duda, es más, incluso el resultado de "erróneo" puede ser subjetivo.

    Uno de mis razonamientos habituales sobre los errores es que son la base de un aprendizaje para la vida. Pero por contra...Es posible que empecinarnos en dichos errores sin valorarlos y dejarlos enquistar en el tiempo conlleven problemas más profundos. El aprendizaje sobre errores es como el peine para los calvos, una útil herramienta que no sirve da nada cuando pasa el tiempo y es demasiado tarde.

Conclusión final: Cada uno toma sus decisiones y es responsable de sus consecuencias. Valorar y asumir riesgos y saber rectificar a tiempo los errores cometidos son la diferencia que marca el éxito de nuestra corta vida.



*Apriorismo es la tendencia a razonar por hipótesis sin considerar los hechos reales ni tener conocimiento adecuado del asunto, bajo influencias tendenciosas y basado en preconceptos.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Bob Esponja procrastina



   Cuando mi mujer estaba embarazada, sólo veía embarazadas, ahora que tengo un bebé, sólo veo bebés. No somos capaces de procesar toda la información de la que disponemos a diario, por lo que prestamos atención especialmente donde tenemos "el foco".
   El otro día vi uno de los insufribles capítulos de Bob Esponja y como últimamente tengo el foco en la gestión del tiempo, me enganchó. Y ahí estaba yo con mi niña, emocionado, viendo a Bob Esponja- con lo verde que he puesto yo a este bicho-. 

Os envío un enlace en el que se ve como procrastina Bob Esponja.


http://www.youtube.com/watch?v=JpKC4XYjTfc&feature=player_embedded


Fragmento de un artículo de Society of 2000. La procrastinación: Una epidemia de nuestros días.
   La procrastinación es un complejo trastorno del comportamiento que a todo el mundo nos afecta en mayor o menor medida. Consiste en postergar de forma sistemática aquellas tareas que debemos hacer, que son cruciales para nuestro desarrollo y que son reemplazadas por otras más irrelevantes pero más placenteras de llevar a cabo. Es asumida popularmente como simple "pereza". Afecta a multitud de perfiles (el ejecutivo que aplaza una y otra vez una reunión porque la prevé conflictiva, el estudiante que aplaza indefinidamente el estudiar para sus exámenes, etc.) y cada vez más se está convirtiendo en un serio de problema que afecta a la salud psicológica de los individuos y, por ende, a la salud social de una comunidad…